EL ENCUADERNADOR 

-Bridget Collins 

“Recuerdos. No personas. Cogemos recuerdos y los encuadernamos. Aquello que las personas no soportan recordar. Aquello con lo que no pueden vivir, cogemos esos recuerdos y los encerramos para evitar que sigan haciendo daño. Eso son los libros”.

Sinopsis del libro 

Imagina que los libros no solo contienen historias. Imagina que puedes ocultar entre sus páginas tus mayores miedos, tu dolor más profundo, tus secretos más oscuros. A todo el mundo. Incluso a ti mismo. Para siempre.

Un relato de deseos enterrados y traiciones indescriptibles. 

Una historia de amor que desafía todos los límites. 

Una novela mágica e inolvidable.

“Intensa y envolvente. Una obra conmovedora y original que recrea todo un mundo”. – The Sunday Times.

Mi reseña 🤓

Hola 🙂 si eres lector recurrente por aquí, seguramente te sorprenderá encontrar un libro de fantasía aquí. A mí también. La verdad la fantasía no está en mi zona de confort literaria. Pero para eso están los retos lectores en el que me metí este año y eso me ha ayudado a ampliar esa zona. Gracias a él leí esta novela. Es muy útil, te recomiendo empezar uno. Si quieres ayuda con eso puedes escribirme y yo te ayudo, porque tu divulgadora literaria de confianza soy 🤓

Bien, quienes no están acostumbrados a leer ciertos géneros y desean empezar a adentrarse en él, coincidirán conmigo en que es difícil elegir un título en concreto. Así que mi instinto literario me susurró que está preciosa portada contenida en un encantador y dorado lomo, ocultaba dentro de sí una lectura digna de ser leída. De verdad la portada y la edición del libro son una auténtica belleza ♥

Esta es la historia de Emmet, un chico que después de terminar su jornada laborado, recibe una enigmática carta que le cita a incorporarse como aprendiz de encuadernador. Pero en ese mundo, esa profesión despierta miedo y superstición en la gente. Lo aterrador de esta cita es que no es opcional, sino algo que está obligado a cumplir. 

Así que se traslada a una remota cabañita en la que vive su mentora, la anciana Seredith, Emmet piensa que es la persona más vieja que ha visto en su vida, y sus lecciones al principio le resultan incomprensibles, porque la profesión que tendrá entre manos por el resto de su vida, es muy delicada: aprenderá a elaborar libros que, no solo tendrán un aspecto precioso y serán realizados con el mayor de los cuidados, sino que, cada uno de esos tomos conservarán los recuerdos de personas y resguardarán sus más grandes secretos, esos que el propio “encuadernado” no se siente capaz de llevar consigo en la memoria.

Funciona de la siguiente manera: Todo aquel que quiere olvidar algún lapso de su vida, puede ir con un encuadernador, cuyos servicios consisten en encerrar los recuerdos de esas vivencias desagradables en libros que se resguardan en un lugar secreto bajo el taller: una especie de biblioteca del olvido, en la que los volúmenes permanecen esperando. Aunque será mejor que nadie los lea. Porque de hacerlo, esto tendrá consecuencias catastróficas para el encuadernado. Por lo que el encuadernador no solo se compromete a hacer que el solicitante olvide, sino a resguardar los libros y defenderlos con su propia vida de ser necesario. 

Pero un día, Emmet descubre su nombre en uno de esos de esos libros, y todo comienza a salirse de control… Y todo ese torbellino de dolor y confusión en la que se vio envuelto en las últimas semanas, comienza a cobrar sentido. Lo que desencadenará una serie de eventos, descubrimientos y traiciones, para los que nadie está preparado. 

Una novela mágica que termina convirtiéndose en una historia de amor prohibido, intenso y desesperado, que te mantendrá en suspenso preguntándote si será capaz de sobreponerse. 

Gracias por estar aquí, y por acompañarme a salir de la zona de confort literaria ♥ tú también inténtalo, estoy convencida de que te llevarás muchas sorpresas agradables ✨📚

Angie 🤓

“¿Qué era peor, no sentir nada o llorar por algo que ya no recordabas? Con toda certeza, cuando olvidases, también olvidarías qué es estar triste, pues de lo contrario, ¿qué sentido tendría? Sin embargo, esa insensibilidad te arrebataba una parte de ti mismo, era como tener el alma en vilo”.